En la era actual, donde la transición hacia fuentes de energía más sostenibles es imperativa, los sistemas fotovoltaicos conectados a la red pública de electricidad se presentan como una solución crucial. En Ecuador este servicio entró en funcionamiento en el año 2018 con la Regulación Arconel-003/2018, en este 2023 se ha realizado la última actualización de este servicio con la Regulación Arcennr-008/2023. Uno de los elementos distintivos y ventajosos de estos sistemas es la capacidad de prescindir de baterías. Al entregar los excedentes de energía generados por la luz solar a la red eléctrica pública, estos son registrados como un saldo a favor del usuario. Este enfoque elimina la necesidad de almacenar energía localmente, simplificando la infraestructura y reduciendo costos asociados.
Además de esta eficiencia operativa, la conexión a la red ofrece beneficios significativos para el medio ambiente al reducir la necesidad de fabricar, mantener y desechar baterías, lo que conlleva a una disminución sustancial de la huella de carbono asociada con la generación de energía.
Fig. 1. Residencia con sistemas fotovoltaico conectado a red.
A continuación, se presenta los principales beneficios de la aplicación de estos sistemas:
1. Generación de Energía Renovable:
Uno de los beneficios más prominentes de los sistemas fotovoltaicos conectados a la red es su capacidad para generar energía a partir de una fuente renovable y limpia: la luz solar. Al aprovechar esta energía sostenible, se reduce la dependencia de los combustibles fósiles y se contribuye a la mitigación del cambio climático.
2. Ahorro en la Factura de Electricidad:
Los usuarios que optan por instalar sistemas fotovoltaicos pueden experimentar un significativo ahorro en sus facturas de electricidad. Al generar electricidad de forma local, se reduce la necesidad de comprar energía de la red, permitiendo a los propietarios disminuir o incluso eliminar sus costos de electricidad convencional.
3. Créditos de Energía Renovable (Net Metering):
En muchas jurisdicciones, los propietarios de sistemas solares pueden beneficiarse de programas de net-metering. Este mecanismo permite la devolución de la energía no utilizada a la red, generando créditos que compensan el consumo durante periodos sin sol, esto permite que la Red Eléctrica Pública funcione como una “bateria” con una eficiencia del 100%. Esto no solo beneficia a los usuarios individuales sino que también contribuye a la estabilidad de la red eléctrica.
Fig. 2. Funcionamiento del Sistema Net-Metering.
4. Estabilidad de la Red Eléctrica:
La generación distribuida proveniente de sistemas fotovoltaicos aporta estabilidad a la red eléctrica al reducir la carga en momentos de alta demanda. Esta descentralización ayuda a prevenir apagones y mejora la confiabilidad del suministro eléctrico.
5. Reducción de Pérdidas en la Transmisión:
La proximidad de la generación de electricidad a los puntos de consumo disminuye las pérdidas asociadas con la transmisión a largas distancias. Esta eficiencia contribuye a la optimización del sistema eléctrico en su conjunto.
6. Incentivos Gubernamentales y Subsidios:
Numerosos gobiernos ofrecen incentivos financieros y créditos fiscales para fomentar la instalación de sistemas fotovoltaicos. Estos incentivos hacen que la inversión inicial sea más accesible y atractiva para los consumidores, acelerando la adopción de la energía solar.
7. Desarrollo Sostenible:
La adopción generalizada de sistemas fotovoltaicos representa un paso significativo hacia un modelo energético más sostenible. Al reducir la huella de carbono asociada con la generación de electricidad, se contribuye al desarrollo sostenible a nivel ambiental y social.
8. Incremento del Valor de la Propiedad:
Además de los beneficios económicos directos, la instalación de sistemas fotovoltaicos puede aumentar el valor de una propiedad. La creciente demanda y aprecio por la sostenibilidad hacen que estas instalaciones sean atractivas para los compradores de viviendas.
Fig. 3. Integración arquitectónica de los sistemas a la estructura.
En resumen, los sistemas fotovoltaicos conectados a la red pública de electricidad ofrecen una variedad de beneficios que van desde el ahorro económico para los usuarios individuales hasta contribuciones significativas a la estabilidad y sostenibilidad de la red eléctrica en su conjunto. La continua promoción y adopción de estas tecnologías son esenciales para avanzar hacia un futuro energético más sostenible. En Ecuador con la regulación vigente se puede aprovechar significativamente de estos sistemas, principalmente para clientes con elevados consumos energéticos, que debido al sistema tarifario escalonado que se aplica actualmente deben cancelar facturas elevadas.
Bibliografía:
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