La conciencia de que los recursos naturales no son ilimitados, está cada vez más extendida y sobre todo comprendida es su magnitud por los cambios que viene presentando drásticamente el planeta, a causa del calentamiento global. El mundo va cambiando conceptos y realidades; como el uso de combustibles fósiles, generación de energía eléctricas con fuentes no renovables. Estos elementos, según el concepto de smart city (ciudad inteligente) irán poco a poco desapareciendo hasta que en unos años pasen a ser recuerdos del pasado. La sostenibilidad es el fin último de todas las medidas medioambientales que se toman. Cuando ingresamos a una ciudad intermedia, normalmente sentimos que la escala urbana es adecuada a las necesidades de la misma, su tamaño la humaniza y todo “está más a mano”. Los tiempos son más pausados, y el ritmo de vida menos acelerado en comparación con los grandes conglomerados humanos que representan las grandes ciudades, pensar en términos smart en ciudades intermedias abre un abanico de posibilidades que podríamos manejar.
Las ciudades son los motores de las economías de los países y proveedoras de bienes y servicios para el bienestar de sus habitantes. El bienestar es una cualidad multidimensional, más aún cuando se trata de un deseo de una colectividad de personas, heterogéneas por definición. Las autoridades públicas locales tienen, por delegación normativa, atribuidas numerosas competencias que tienen como objetivo último garantizar niveles mínimos de bienestar a los residentes y transeúntes de los núcleos de población de su radio de acción correspondiente.
El fuerte crecimiento y desarrollo urbano acontecido en los últimos años condicionan a que las ciudades sean el nuevo reto para el desarrollo adecuado de la humanidad, todo esto vinculado directamente a importantes transformaciones tecnológicas, intentando dar respuesta a sus necesidades. En este escenario de desarrollo actual y futuro, las ciudades van a ser los motores principales de cambio y las denominadas “Smart Cities”, con la finalidad de alcanzar un verdadero desarrollo sostenible, económico, medioambiental y social.
La conectividad es el elemento clave para poder unificar todas las tecnológicas inmersas en una smart city, las ciudades necesitan poseer una red con las condiciones necesarias para que soporten todo el aparataje que involucran las tecnologías smart y ser fiables en el tiempo, con el fin de no pasar por interrupciones que puedan alterar el orden establecido para las ciudades.
Nunca antes los avances tecnológicos habían repercutido tanto en la forma de vida de las personas, como en la última década. El impacto de las tecnologías ha supuesto una revolución que si bien no se podría llamar industrial es un salto tecnológico representativo para la evolución de las ciudades emergentes. Las tecnologías han de ser entendidas básicamente como una herramienta para este proceso de trasformación.
La creciente evolución de las tecnologías IoT abre las puertas a una interconexión digital de objetos cotidianos con internet, esto constituye un cambio radical en la calidad de vida de las personas, ofrece una gran cantidad de nuevas oportunidades de acceso a datos, servicios específicos en la educación, seguridad, salud y en el transporte, entre otros campos, así mismo la aparición de “Big Data” y “Open Data” permite controlar y almacenar grandes cantidades de información provenientes de los sensores dispuestos a lo largo de la smart city.
Las Redes de Servicios Inteligentes o Redes de Suministro Inteligentes (smart grids), son parte de las nuevas infraestructuras eléctricas que poseen las ciudades, han de ser la evolución de las existentes alcanzando una mayor eficiencia y con ello el beneficio directo a la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero. La tecnología actual alcanzada permite, o va a permitir de aquí a poco tiempo, gestionar los servicios de distribución energéticos y de abastecimientos de todo tipo, con mayor eficiencia y mayor nivel de implementación a medida que esta se vaya incorporando a las redes, pero han de contar con medidas encaminadas a la sostenibilidad para poder denominarse inteligentes.
¿Cuál es el rol de las ciudades frente al acelerado crecimiento tecnológico?, es un tema bastante complejo de discernir, probablemente no todas las ciudades se encuentren preparadas para el cambio que implica convertir una ciudad tradicional en una ciudad inteligente, bajo el concepto y transformación que va a suponer la Smart City, la planificación que deben tener las ciudades ha de ser entendida como una auténtica Planificación Estratégica, como si de cualquier empresa o gran compañía se tratase, dando preponderancia al ciudadano como si éstos fueran sus clientes finales entendiendo que el principal objetivo de una smart city es mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos. La planificación estratégica de las ciudades, ha de llevar a la ciudad a un estado superior en el que los niveles de sostenibilidad, competitividad, y de calidad de servicios, sean los más adecuados posibles, promoviendo en todo ello la participación de todos los agentes y grupos de interés, la inclusión, la accesibilidad y la transparencia.
En este contexto, por tanto, ya no solamente cabe hablar de Smart Cities, si no que se puede extender el término Smart a las regiones y a los territorios aledaños a la ciudad; recordemos que los centros poblados que colindan con las ciudades no pueden ser abandonados cuando una ciudad se transforme en una Smart City, las ciudades intermedias como Loja son ideales para iniciar los procesos de trasformación e implementación de tecnologías que garanticen mejor calidad de vida para sus ciudadanos.
“Una Smart City es un lugar donde la tecnología cobra vida”. La frase de Peter Sany, Director Ejecutivo de TM Forum 5, es un buen punto de partida para entender el alcance del término Ciudad Inteligente. Las Ciudades Inteligentes no solo usan la tecnología para dar a conocer sus actividades o departamentos. En ellas, la tecnología sirve para conectar a ciudadanos y empresas con la ciudad y entre sí, eliminando vacíos de información y reduciendo impactos negativos mediante la distribución inteligente de los recursos.
Bibliografía
· Smart Cities, Ranking of European medium-sized cities. Final report. Vienna University of Technology, Delft University of Technology, University of Ljubljana. Edición: Centre of Regional Science, Vienna UT, 2018
· Análisis de las Ciudades Inteligentes de España. IDC. Edición: IDC, 2017.
· Smart Cities: un primer paso hacia la internet de las cosas. Fundación Telefónica. Edición: Fundación Telefónica y Editorial Ariel.
